Si el vehículo lo compras a través de un concesionario de coches, el propio concesionario te ofrecerá la posibilidad de que sean ellos o su gestoría quien se ocupe de los trámites del cambio de nombre. Esta gestión puede tener un coste 100 a 200€ sumados a los gastos propios de la transferencia del vehículo.
Para que te hagas una idea, los gastos que se generan con dicha transmisión a modo esquemático son los siguientes:
- Precio: Naturalmente el primer gasto será el pago del precio, aunque esto no sea un gasto en sí sino la contraprestación a pagar a cambio de tener la plena propiedad, uso y disfrute del vehículo.
- Impuestos: Toda transmisión está sujeta a impuestos y dependiendo del tipo de transmisión se aplicará un impuesto u otro:
Si el vehículo se dona (transmisión gratuita) dicho acto estará sujeto al impuesto de donaciones tomando como base imponible el precio de venta. El sujeto pasivo es el adquirente quien deberá efectuar liquidación del impuesto conforme al modelo 651 de la Comunidad autónoma correspondiente.
Si por el contrario el vehículo se adquiere mediante herencia, el impuesto al que está sujeto es el sucesiones. Este impuesto se pagará mediante autoliquidación del heredero quien pagará la cuota resultante tras realizar la declaración del impuesto de todo el patrimonio heredado (no solo del vehículo).
Si compramos el vehículo en un concesionario de coches de segunda mano, todos los concesionarios trabajar con gestoras administrativas, para agilizar los cambios de nombre, el coste de este cambio de titularidad oscila entre los 120€ y 250€ según zonas.
Si lo compramos a un particular el impuesto será el de transmisiones patrimoniales. Este impuesto varía de una comunidad autónoma a otra oscilando del 4 % al 8 %.
- Tasas: En toda transmisión o transferencia de cambio de titularidad de un coche en el Registro de la DGT, se devenga el pago de una tasa fija que actualmente está fijada en 54,60 euros. La liquidación se realiza utilizando el modelo normalizado 720 de Tráfico.
