6 formas de cuidar el aire acondicionado del coche en verano.

Jorge Giraldez Ariza

Si el sistema de aire acondicionado de tu vehículo no funciona correctamente, los trayectos durante los meses estivales bajo el sol abrasador serán sofocantes.

Durante el verano ni siquiera bajar las ventanas podrá aliviar las altas temperaturas que pueden sobrepasar los 50ºC en el interior del coche. Solo el aire acondicionado puede salvarnos.

Sin embargo, la mayoría de los conductores no nos preocupamos por el aire acondicionado hasta que comienza a fallar. Lo cierto es que es fácil pasar por alto un mantenimiento regular, especialmente si no lo usas durante todo el año. No esperes a que sea demasiado tarde cuida del sistema de aire acondicionado de tu vehículo para que continúe funcionando y tu conducción sea lo más confortable y segura posible.

A continuación compartimos 6 consejos y trucos para cuidar del aire acondicionado del coche durante todo el verano:

1. Cambia el filtro de aire con regularidad

Un filtro de aire sucio no solo afecta la calidad del aire que entra en la cabina del automóvil, sino que también reduce la eficiencia del combustible. De hecho, cuando instalas un filtro de aire limpio, mejora el rendimiento de la gasolina hasta en un 10 por ciento.

Es una buena idea cambiar el filtro después del invierno. Por lo general se recomienda cambiar el filtro cada 20.000 kilómetros, pero esto dependerá del tipo de carreteras por las que circules habitualmente. Por un camino de tierra el filtro del aire se obstruirá antes que si solo conduces por carretera.

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2. Proteje el exterior del vehículo

La forma en que cuides el exterior de tu coche, especialmente cuando no lo estés conduciendo, afectará al funcionamiento de sistema de aire acondicionado.

Es aconsejable mantenerlo estacionado en un garaje, o debajo de un toldo o cochera si es posible. El calor no solo puede provocar daños estéticos, sino que también dificulta que el aire acondicionado enfríe el interior del vehículo.

Un parasol en el parabrisas evitará que el sol entre reduciendo la aparición de grietas o decoloración, y ayuda a mantener el interior fresco.

Otra forma de proteger el exterior es encerar regularmente tu coche con esmalte UV. Y así disminuir el daño causado por la luz brillante.

3. Baja o sube las ventanillas

Al entrar en el coche que ha estado expuesto al sol el habitáculo puede tener una temperatura muy elevada.

En este caso evita poner primero el aire.Es recomendable esperar a que se refresque el interior del coche, bajando las ventanillas y circulando un poco antes de encender el aire.

Cuando hayan bajado un poco los grados en la cabina ya puedes ponerlo en marcha y subir las ventanas. Llevar el aire encendido con las ventanas bajadas afectaría al rendimiento del vehículo.

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4. Empieza poco a poco

Utiliza el aire acondicionado de manera adecuada para que el sistema dure más tiempo y rinda mejor. A pesar del calor abrasador es mejor comenzar a usarlo con un nivel bajo para ir poco a poco ajustándolo a la temperatura apropiada.

Del mismo modo que evitas aceleraciones rápidas para mantener tu vehículo, encenderlo e ir gradualmente aumentando la temperatura y la velocidad a la que el aire sale de las rejillas, ayudará a preservar el aire acondicionado.

Así no sobrecargas el trabajo del sistema desde el momento en que enciendes el coche.

Por otro lado mantener activado el modo de recirculación en todo momento evitará que el aire acondicionado succione aire caliente del exterior.

5. Evita el mal el olor

Si al encender el aire detectas un olor extraño, se debe a que la humedad en las salidas del aire comienza a enmohecerse. Lo más probable es que esto sea lo que está causando ese hedor.

Hay dos formas de evitar que esto suceda. Una de ellas es limpiar las salidas de aire cuando haga la limpieza regular en el interior del coche. Mantener el filtro de aire fresco, ayudará a minimizar la acumulación y, por lo tanto, el olor.

La segunda forma de evitar el olor a moho es ejecutar el modo de descongelación antes de poner el aire a tope. Simplemente ejecutando esta función de cinco a diez minutos, cuando encienda el vehículo por primera vez, limpiará el exceso de humedad y evitará el moho.

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6. Revisión anual

Es una buena idea revisar el sistema de aire acondicionado aproximadamente una vez al año. De esa manera, cualquier fuga, falta de líquidos u otros problemas podrán detectarse y repararse antes de encontrarte conduciendo sin aire bajo las altas temperaturas del verano.

Conviene realizar este servicio de aire acondicionado antes de que llegue el verano. Para ello confía en tu taller de coches. En general el servicio incluirá:

la verificación de la temperatura de ventilación de aire; el reciclaje o reemplazo de gas; inspección de la manguera y sus partes circundantes; inspección o reemplazo si es necesario del filtro de aire; pruebas de fugas e higienización, entre otras.

La DGT recomienda mantener el interior del vehículo a una temperatura entre los 21º y 24º. Circulando en estos grados nos encontraremos más confortables, seguros y nos cansaremos menos.

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